El Chorro de Los Ángeles, al igual que El Chorritero o La Meancera, es una de las múltiples cascadas que podemos visitar en Las Hurdes. Se encuentra en Ovejuela, alquería de Pinofranqueado. Tiene una caída de mas de 200 metros y se puede disfrutar desde un mirador que ahora es accesible también para personas con movilidad reducida.
Cómo llegar
Para llegar hay que coger la carretera CC-155 desde Pinofranqueado a Ovejuela y una vez pasado el cruce que va a la presa del Río Los Ángeles, unos metros más adelante, veremos a la izquierda los carteles que indican la pista forestal que hay que coger. Son unos 9 kilómetros aproximadamente. Se puede realizar tanto a pie, en bicicleta o coche.
El recorrido nos brinda la posibilidad de disfrutar de unas magníficas panorámicas del paisaje hurdano y de su rica flora entre la que destaca el olor a pino y brezo.
En la zona habitan especies como buitres leonados, alimoches o cigüeñas negras, de hecho es común divisar buitres sobrevolando la cascada.
Ruinas del Convento
Estos caminos se crearon con la llegada de San Francisco de Asís, que en su paso por estas tierras camino a Portugal, quedó cautivado por el encanto de las sierras y ordenó construir el Convento de Los Ángeles en el siglo XIII. Lamentablemente hoy está en ruinas.
Para llegar hasta las ruinas del Convento, en la misma pista forestal que nos lleva hasta el mirador, hay un cartel que indica las ruinas del convento y el puente de Los Frailes.
Puente de Los Frailes
Este puente fue construido en el siglo XIII para el paso del ganado cuando el río estaba crecido. Es un símbolo de la arquitectura (e ingeniería) tradicional de Las Hurdes en el que se puede apreciar que está construido con grandes piedras de pizarra (abundantes en la zona) colocadas casi verticalmente, sostenidas unas a otras sin utilizar ningún tipo de argamasa. Destaca su impecable estado de conservación.
Otro motivo más para visitar nuestra preciosa comarca de Las Hurdes, paraíso natural.